Antes de leer alguna entrada de "Cierto personaje acusado de alta traición":

24 de agosto de 2020

Cuando compras un pasaje a cualquier lugar

Hace algunas semanas compré dos pasajes y pasé algunos minutos escogiendo el destino. Había destinos exóticos, onda medio oriente o islas del Pacífico. Yo iba de página en página y compré a dos destinos, de un lado a otro y, de ahí, de regreso. Fue bien grato comprarlos y podía ver el destino, las fotografías que te dan más ganas de viajar.
Hoy (22 de agosto) recordé esos pasajes comprados, estaban los detalles y la hora; me hice la weona un rato para perder los pasajes (cuando sales del país debes estar en el aeropuerto tres horas antes) y ya eran 45 minutos para que saliera el avión. Mi familia andaba dando vueltas por ahí y ellos también arreglaban las maletas. Al viaje iba mi familia también (mamá y hermanos), no sé por qué; según yo, compré el pasaje sólo para mí. Tomamos el avión y el viaje se me hace corto, puedo entretenerme viendo las nubes y no recuerdo mucho más.
El lugar, a pesar de ser un destino escogido al azar, era un sitio que yo conocía. Hay un café muy lindo con paredes exteriores y divisiones interiores que son de rejillas diagonales, como para que algunas plantas volubles se agarren con zarcillos y con sus flores cubran la base. El café es prácticamente un pasillo delgado, pero se alcanza a pasear dentro porque es largo, puedes recorrer de lado a lado dentro de una cuadra cualquiera. Al salir, las calles son de adoquines. El sol siempre está en el cielo y es agradable el clima.  

¿Cómo es que sueñas una vez (hace semanas) que compras un pasaje a dos destinos aleatorios y luego sueñas con esos pasajes y viajas? Anécdotas de viajes que dan repelús.

PD: no me gusta viajar, lo evito todo lo que puedo.



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