Antes de leer alguna entrada de "Cierto personaje acusado de alta traición":

5 de marzo de 2015

Mi pan, el pan de todos.

Penúltimo día de la Feria del Libro de La Serena, decido junto a Daniel hacer algo para despedirme de nuestros amables colaboradores -amables es decir poco, se han portado excelente con nosotros: respetuosos, confiables, cariñosos, preocupados y valientes-, un jugo de duraznos salidos de un árbol de mi jardín, pan amasado casero y pebre estilo japonés, todo hecho en casa, durante la jornada de la mañana. Empaqué todo cariñosamente, me preocupé de que las cosillas estuvieras ricas, sabrosas, lo llevé a la Feria con cuidado, lo cuidé hasta que la jornada casi finalizó. Estaba contenta de todo, por todos nosotros, por aquella mesa que había preparado para MIS amigos/colaboradores, para los que casi a diario pasaban a saludar, se sentaban con nosotros y reían con nosotros, para los que confiaron en nosotros. Me dedico quince minutos a desarmar el local y viene una vieja de mierda con uno de mis panes en la mano pidiendo comida para personas que JAMÁS se acercaron siquiera a saludar.

-¿Les puedo dar pan a los viejitos del Círculo Carlos Mondaca?
-No, no puede.
-¿Ah no?
-No, este pan yo lo hice para nuestros colaboradores, mis amigos; no para el Carlos Mondaca o quien sea, no para personas que ni saludan ni son amables con nosotros.

Se da la vuelta y camina a la mesa, recibo sonrisas de los muchachos que fueron testigos. Supongo que está bien lo que le dije, me quedo tranquila, pero pensando en el incidente.
Me cuentan después que la loca ésta igual se comió uno de mis panes, además llamaba a los viejitos del Círculo Carlos Mondaca para que fueran a sacar pan. Dejó tres mendrugos de pan en la mesa y le dijo a un amigo mío "cuídamelos" ¡¿qué chucha está pensando?! ¿por qué no le quité el pan y la eché a patadas de ahí?.

Alguien podría decir "ey, es un pan, sólo un miserable pan que se niega a una pobre mujer loca y hambrienta" y yo les digo ODIO QUE LAS PERSONAS QUE YO NO APRECIO NI QUIERO COMAN LO QUE YO HE PREPARADO CON MIS MANOS (Jamás cocinaría para alguien que no conozco, menos para alguien a quien no le tengo cariño). Será un "miserable" pan o lo que sea, podría ser sushi o paella, pero me revienta que extraños se sientan con los cojones de pedirme comida siendo que ni me miran cuando pasan a mi lado, ni les preocupa que yo esté cansada o irritada, ni se detienen a curiosear en espacios en que ellos no participan y menos conocen lo que uno hace. ¿A pedir pan la weona? ¡la próxima me tendrán que detener para no pegarle una buena "patá en la raja" a esa o cualquier otro!