Comentarios de la vida libre, sus consecuencias, la secuencia de error, la vida definitiva y el delirio nocturno en su máxima expresión.

-De los sesenta y algo días que has pasado aquí, diez y no más, te he visto "feliz", no amargado.
Eso dijo la persona comodamente sentada en la cabecera de la mesa, pero ¿quien es este personaje?, hay veces en las que me pregunto qué significa ese lugar en la mesa ¡u otro misterio! ¿que significa que Saturno (su adorable servidor) se siente a la izquierda de este misterioso personaje?. No es que mi vida sea una constante mueca de insatisfacción, claro, debo llevar un rostro "serio", no debo decir verdad o mentira (ya probé y no funciona), se trata de parecer indiferente a la situación, sea cual sea. El problema va en que me comporte como me comporte, molesto.
Me enteré de que una persona que conocí hace catorce años, no ha cambiado, su personalidad es igual ¡sigue exactamente como solía ser!.
Saturno ha sufrido una serie de transformaciones que le han convertido en un ser inestable, ríe como nadie en momentos inoportunos, sufre como nadie en situaciones inadecuadas, experimenta la sensación de pérdida total, a menudo se pierde confundido, es como la nube que no se molesta en ser arrastrada por los vientos o lo que venga.
¡Es que la sensación de ser un loco perdido no se va a ir nunca!.
Volviendo al aporte de este primer día de marzo...
Me molesta haber perdido mi identidad mientras trataba de agradarle al mundo, mientras trataba de dejar mi faceta inocente y tontorrona, mientras trataba de construir una personalidad maravillosa que atrajera a la gente a mi lado. Siento que una parte importante de mi desapareció cuando decidí ser serio y enigmático, cuando permití que las emociones se almacenaran para explotar en algún momento de tensión, cuando acabé con la persona simple que era.
Hay gente que me recuerda feliz, siempre sonriendo y tratando la vida despreocupado, viviendo cada momento como el último. A toda esa gente le digo: a la hora que sigo con la mentalidad que tanto les gustaba ¡estaría sufriendo las penas del infierno!. Gracias a la gente que se burló del gran Saturno, gracias al imbécil que le hizo estallar de ira, gracias a la gente que se alejó cuando tenía esa aura venenosa (que no se quita con nada), gracias a la gente que me hizo sentir el corazón contraído de dolor. Me hicieron cambiar de tal modo que le agrado a la mayoría de la gente porque sé llevar una conversación, puedo retener información útil y soy fácil de tratar cuando ando angustiado, pero a la vez, crearon a un potencial sujeto de experimentación, un maldito loco con delirios de grandeza y un ser que siente que se derrumba con facilidad. El ser humano no esta preparado para la gente que cree estar en la cima del mundo ¡el planeta no esta preparado para Saturno! [aquí va la risa desquisiante].